El viernes las hermanas Vicente (Beatriz y Laura), Zak y el que esto escribe nos dirigimos al Valle del Tiétar, alquilamos una casa rural en el centro del pueblo, con la inestimable gestión de Alfredo, organizador de la prueba. La Casa Rural La Araña, coqueto establecimiento de cinco plazas y que admite perros, condición imprescindible para nuestra estancia.
Mi relación con la Villa de Piedralaves viene de mis años de monitor Scout, allí en el campamento de Mariano, pasamos algunos campamentos de Semana Santa y más de una excursión de fin de semana.
Hace algunos años casualidades de la vida mi hermano y parte de su familia Getafense eligieron este pueblo para tener una casa donde pasar los ratos de ocio, vacaciones y fines de semana, esa fue la razón de volver a tomar contacto con este pueblo. Hemos participado en su campeonato de fútbol sala de verano, hemos conocido a gente que se ha unido a nuestro bagaje de amigos y es lo más parecido a un "pueblo" que hemos tenido nunca.
La carrera limitada a unos pocos cientos de participantes, contó con una participación de "altura", vimos a pesos pesados del atletismo popular, de las carreras de montaña y de cross, pudimos saludar a Jaime antiguo compañero de Club y un máquina en esto de dar zapatilla. Por allí estaba también José María González, un clásico del pueblo... iros haciendo una idea de los personajes que corren por estos lares, todo un campeón de Europa de 100 kilómetros...
La distancia 10 kilómetros, una primera vuelta por las calles del pueblo completando un kilómetro para salir del mismo dirección al monte, a partir del kilómetro cuatro empiezan las hostilidades, unas pendientes según la organización del 14%, todos nos esperábamos un kilómetro en esa tónica... pero Murphy tiene razón, si es uno pueden ser fácil dos, y quien sabe tres están bien... hasta el kilómetro seis la subida es bestial, yo me esos dos kilómetros los pasé andando, un poco más adelante nos dan agua, desde aquí hasta el ocho doscientos cálculo yo, una sucesión de toboganes con bajadas muy rápidas y subidas exigentes, el último uno ochocientos una bajada frenética, este último tramo lo hago con un compañero que me dice que aún podemos bajar de la hora, yo no pensaba en ningún caso a esas alturas que fuera posible... al final una hora y seis segundos, tenía razón no era descabellado bajar de la hora.
En cuanto al resto de participantes del Nunca, Gustavo llegó a unos cien metros de la ganadora de la prueba, después llego mi hermano Alberto por debajo de la hora, les seguí yo, unos pocos minutos después llegó Carlos el Churri y cerraron nuestra participación que no la prueba, Beatriz y Gabi en algo menos de hora y cuarto, cruzaron la meta con Zak y se llevaron una de las grandes ovaciones de la tarde... por supuesto por el perro. Lamento no ser muy exacto con los tiempos, no había control de los mismos en la prueba y mi memoria es limitada...
La gente del pueblo animando por el recorrido, muy respetuosos con el corte del tráfico y entregados a la jornada solidaria "Dame tu mano, soy como tú".
Me encanto la carrera, el perfil es muy duro quizás demasiado para mi momento de forma, pero el entorno es precioso, el año que viene espero que se repita, tengo una marca que batir.
Un saludo.